Ya vengan en forma de quejas de los clientes o de controles de calidad fallidos, los escapes de calidad pueden tener un gran impacto en el balance final de su empresa: directamente a través del coste de los materiales y la mano de obra en el proceso de reelaboración, e indirectamente a través de la pérdida de satisfacción y confianza de los clientes.
Los directores de planta de todos los sectores se esfuerzan por evitar escenarios en los que los productos defectuosos salgan de la fábrica o los productos acabados pasen por constantes retrabajos. Pero para los fabricantes de artículos de lujo, prevenir las fugas es aún más crítico.
Después de todo, algunas características únicas de la fabricación de artículos de lujo son los costosos materiales que intervienen en el proceso de producción y la línea de producción de alta mezcla y bajo volumen. La reelaboración del producto desperdicia recursos, ralentiza la línea de producción y retrasa los lanzamientos.
Además, es especialmente crítico para los fabricantes de artículos de lujo mantener la reputación de fabricar productos de alta calidad. En este sector, todo lo que no sea perfección supone un riesgo para conservar la confianza y la satisfacción de los clientes.
Con un aumento del 76% en el coste de las materias primas, las inminentes interrupciones de la cadena de suministro y una mano de obra cambiante, los fabricantes de artículos de lujo están más presionados que nunca para reducir los desechos, los residuos y los reprocesamientos, al tiempo que refuerzan su base de clientes. En el camino hacia la excelencia operativa, un primer paso sencillo es desarrollar una estrategia para evitar las fugas de calidad.
¿Cómo se producen las fugas de calidad en el proceso de producción?
Hay dos causas principales de las fugas. La primera es un problema de calidad en la línea de producción de un fabricante - y la segunda es la falta de datos sobre el material y la producción para detectar y mitigar estos problemas de calidad en tiempo real.
Los problemas de calidad se producen en su línea de producción cuando sus operarios siguen procesos incoherentes y producen variaciones del mismo producto. Esto es muy común en la fabricación de artículos de lujo, donde la digitalización es aún escasa y los operarios dependen de instrucciones en papel, que se actualizan con lentitud. Debido al alto grado de trabajo manual implicado, los operarios a veces conservan su propia versión de las instrucciones. Puede que aprendan un determinado proceso de la persona que se sienta a su lado o de la que les formó durante el onboarding, y que luego pasen este conjunto de instrucciones al siguiente operario cuando le toque realizar el onboarding. La falta de control y normalización de las instrucciones de trabajo genera incoherencias, limita la visibilidad y elude los esfuerzos de mejora de los procesos.
Otra de las razones por las que se producen escapes es la incapacidad de detectar a tiempo los problemas de calidad, lo que suele deberse a la falta de datos operativos y de seguimiento del material. Sin herramientas digitales, los operarios pasan por el proceso ineficiente y propenso a errores de registrar manualmente los datos de producción. El desfase entre la captura, la transferencia y el análisis de los datos elimina cualquier oportunidad de detectar problemas de calidad en el momento, sin la participación de una función de control de calidad. Además, la cantidad limitada de datos de producción impide a los ingenieros de procesos y a los directores de planta identificar los cuellos de botella y los puntos calientes de los problemas de calidad en la línea de producción, lo que les impide realizar a tiempo los ajustes de proceso tan necesarios.
A diferencia de muchos otros sectores, la fabricación de artículos de lujo tiene un proceso de producción altamente manual. Al fin y al cabo, es la calidad artesanal lo que atrae a los compradores y justifica el precio premium. Aunque los fabricantes necesitan mantener el elemento humano en su proceso de producción, también necesitan resolver el reto de la calidad inconsistente y la detección tardía de defectos. Adoptando herramientas digitales como las instrucciones de trabajo digitales, los fabricantes de artículos de lujo pueden empezar a construir operaciones centradas en el ser humano en las que las tecnologías sirvan para aumentar las habilidades de sus empleados, permitiéndoles trabajar más rápido, mejor y de forma más eficiente.
Producción a prueba de errores con instrucciones de trabajo digitales
Las instrucciones de trabajo digitales son la forma más eficaz de mantener sus prácticas de fabricación estandarizadas y actualizadas. A diferencia de las instrucciones en papel, propensas a errores y pérdidas, las instrucciones dinámicas pueden ordenar fácilmente sus nuevas secuencias -y garantizar que los operarios vean siempre las tareas más recientes.
Las instrucciones de trabajo digitales simplifican la gestión de las instrucciones en entornos de alta mezcla como la fabricación de artículos de lujo. Eliminan la necesidad de organizar manualmente las tareas para cada construcción y, en su lugar, le permiten crear un "banco" de tareas, ordenarlas en secuencias y trabajar hasta construir el producto final.
Con la ayuda de indicadores visuales, como los materiales multimedia incluidos en las instrucciones de trabajo, los operarios tienen más referencias para completar su construcción y más posibilidades de detectar defectos durante el proceso de trabajo.
Las instrucciones de trabajo digitales también funcionan como un control de calidad en línea para los operarios. La captura y el procesamiento automatizados de datos significan que su sistema puede verificar que las tareas se han completado correctamente antes de pasar al siguiente paso mediante hardware integrado, como un escáner de códigos de barras o una balanza digital. Esto permitirá a los fabricantes realizar sus operaciones realmente a prueba de errores.
Identifique y mitigue los problemas de calidad con una trazabilidad completa
La captura automatizada de datos con instrucciones de trabajo digitales también proporciona otra capa de protección contra errores al crear una fuente de verdad combinada en todos sus sistemas múltiples. Se acabaron los datos incoherentes de producción y materiales; las máquinas conectadas eliminan los silos de datos y reducen la carga de entrada de datos sobre los humanos. Alejarse de la introducción manual de datos con la ayuda de dispositivos como básculas, sensores y máquinas garantiza que se capturen los datos correctos en el momento adecuado, lo que proporciona una trazabilidad completa para cualquier auditoría o análisis de causas raíz.
La trazabilidad total también significa que los responsables de la planta pueden identificar dónde y cuándo tienen lugar las acciones, lo que les permite detectar cualquier atasco de calidad en el taller. Esto es fundamental para saber cómo se producen los errores y qué cambios deben introducirse para evitar que vuelvan a producirse.
La trazabilidad desde las materias primas hasta los productos acabados también abre oportunidades para que los operarios participen en la toma de decisiones. Con los datos fácilmente disponibles, los operarios disponen ahora de otra herramienta para comunicarse tanto con los responsables de la planta como con los ingenieros de sistemas, y proponer cualquier mejora en los procesos existentes.
Sustituir el papel por instrucciones de trabajo digitales es el caso de uso más popular de las herramientas digitales en la fabricación de artículos de lujo, pero es sólo una de las muchas aplicaciones que pueden ayudar a elevar el nivel de su línea de producción. Cuando se construye sobre una única plataforma de operaciones, un sistema de aplicaciones puede conectar máquinas, humanos y sistemas para aumentar las habilidades de sus trabajadores, aumentar la productividad y la eficiencia y, lo más importante, crear un bucle de mejora continua dentro de sus operaciones.
En este tipo de entorno, sus trabajadores siguen estando en el centro de cualquier esfuerzo de digitalización: son tanto los impulsores como los usuarios de la tecnología, y los sistemas se construyen en torno a la resolución de sus puntos más críticos. Libres de la carga que supone la introducción manual de datos, los operarios de primera línea pueden dedicarse a tareas más críticas e impactantes que impulsen la mejora de los procesos.
Lograr la excelencia operativa en la fabricación de artículos de lujo
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